El demoledor informe de Cáritas

Aumenta la pobreza en España

Imagen de Curro Camacho

La realidad es tozuda y, pese a los continuos mensajes por parte de miembros del Gobierno y de dirigentes empresariales de lo bien que va España, Cáritas ha puesto hoy sobre la mesa su Memoria Anual con datos que desmienten esa verdad de color de rosa que nos están intentando vender a todas horas. La presentación de su Memoria y del VIII Informe del Observatorio de la Realidad Social de Cáritas constatan el aumento de la desigualdad y del empobrecimiento de nuestra sociedad. Tres millones de personas viven en nuestro país con menos de 307€ al mes, mientras un estudio de Credit Suisse afirma que el número de millonarios aumenta en España un 13 por ciento a pesar de la crisis.

Ahora nos dirán que Cáritas habla del pasado y que ellos, los que saben, los que nos desgobiernan, nos hablan de futuro. No obstante, me fío más de Cáritas, que habla con datos reales, que de ellos, que hablan con datos parciales, predicciones o posibilidades más o menos acertadas. Lo real, lo que vivimos en la calle todos los días los que andamos entre la gente normal, nos indica que tenemos un país más pobre, en el que cada vez se trabaja más -los que tienen la suerte de contar con un trabajo remunerado- y se gana menos, que las líneas rojas que el PP no iba a pasar nunca, han saltado por los aires sin que se hayan despeinado siquiera.

+RECORTES, – IGUALDAD, es así de simple, es así de crudo, es así de claro. Si no, que se lo expliquen, sin reírse de ellas, a las 30.000 mujeres a las que se ha dejado sin mamografía preventiva en la Comunidad de Madrid, dentro del Programa de Detección Precoz del Cáncer de Mama.

La suerte de Mariama

Para Mariama no hay sorteos, ni futuros sin crisis, porque ella no sabe qué es una crisis; sabe lo que es el hambre, sabe lo que es la miseria, pero aun así sonríe  con unos ojos negros muy expresivos.

Mariama vive en un pequeño poblado al borde del río Gambia, no desea ningún ipad, solo un caramelo que guarda como un tesoro en su mano. Te mira desde una inocencia pervertida por la necesidad, siguiéndote como un perrillo alegre y juguetón gritando «amigo, amigo; yo amigo», aunque su español se limite a cuatro o cinco palabras que no sabe muy bien que significan, pero que sabe agradecen los pocos turistas españoles que se acercan por allí.

La suerte de Mariama no la va a depender del Gordo de Navidad, ni de la labor que realicen los trece magníficos de Rajoy, pero como siempre existe el efecto mariposa, cuanto mejor nos vaya a los países ricos, menos mal les irá a los países que, como Gambia, ocupan los últimos puestos  en los Indicadores Internacionales sobre Desarrollo Humano elaborados por Naciones Unidas.